A escasos 2 meses de cerrar un año muy complicado, el panorama financiero no es muy halagüeño. Tras las fuertes caídas a nivel mundial que hubo en marzo y abril cuando el covid se convirtió en pandemia mundial, ha habido economías que se han recuperado (a nivel bursátil) como la norte americana y la China, estando a día de hoy por encima de sus valores pre-covid; y otras economías que están lejos de recuperarse como la Europea, que dependiendo de qué país se mire, ha recuperado más o menos la mitad de las caídas, o prácticamente nada (España está en este último grupo).
Pero lo que nos lleva a tomar decisiones a 2 meses de terminar el 2020, no tiene que ver con la pandemia, ya que los mercados han aprendido a vivir con ella, si no las elecciones presidenciales americanas. Según las encuestas, es posible que Donald Trump pierda la presidencia, si bien es verdad que las encuestas fallan casi como una escopeta de feria, no podemos no tenerlas en cuenta. Pero por tener un criterio propio, vamos a plantear 2 escenarios y ver que puede pasar en cada uno de ellos.
Escenario 1, Trump renueva su candidatura. Bien, las políticas de Trump siempre favorecen los mercados, y estos se comportan mejor bajo su mando… pero ¿puede el mercado americano subir mucho más? Pues está en niveles de máximos históricos en un momento de la historia sin precedentes y a punto de empezar a notar los estragos económicos que la pandemia está provocando. La respuesta por nuestra parte es no. Si ganara Trump, es posible que los mercados tuvieran un efecto de subida momentánea, pero no sostenible ni a corto ni a medio plazo.
Por otro lado, tenemos el escenario 2, Trump pierde frente a Biden. En este escenario las probabilidades de que los mercados americanos pierdan valor son muy elevadas. Y si el SP500 o el Nasdaq tienen caídas fuertes, el resto de los mercados mundiales seguirán sus pasos.
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Créditos imagen: Benzoix
